Ni la lluvia ni la pandemia pudieron con la avellana de Piloña. 38 cosecheros vendieron sus frutos

La lluvia, persistente en algunas ocasiones, y la pandemia no impidieron hoy la celebración del Festival de la Avellana de Infiesto, que alcanzó su edición número 49.
El recinto de la plaza del Ganado acogió a un total de 38 cosecheros que pusieron a la venta unas dos toneladas del fruto.
Aunque la situación extraordinaria de alerta sanitaria hizo menguar sensiblemente la presencia de público, lo cierto es que los asistentes llegaron con ganas de comprar el rico fruto de Piloña, de tal manera que al filo de las doce y media del mediodía apenas quedaban ya frutos en los mostradores.
El premio a la calidad del fruto correspondió a Román Canal, de El Texedal, que se hizo además con el galardón de cosechero de mayor edad, puesto que ya ha cumplido los 83.
El segundo premio fue para Candy Priede, de Amieva, y el tercero para Isolina Lobeto, de Espinaréu.
Las mejores plantaciones fueron las de Verónica Longo (El Texedal), Isolina Lobeto y Manuel García (Pintueles). La niña, Carmen Rodríguez, de 9 años, se llevó el premio a la cosechera más joven.