LA MUESTRA FOTOGRÁFICA "HALLAZGO DE LO IGNORADO" LLEGA A LA CASA DE CULTURA DE INFIESTO

La Casa de Cultura Marqués de Vistalegre de Infiesto ofrece estos días una interesante exposición, "El hallazgo de lo ignorado", que se podrá contemplar durante varias semanas, hasta su clausura, el próximo 31 de julio. Recoge antiguas fotografías de Asturias tomadas en los primeros años del pasado siglo.

El horario para visitar la muestra será de lunes a viernes, de 10:30 a 14:00 horas y los martes y jueves, además, de 16:00 a 19:00.

SOBRE LA EXPOSICIÓN

El 31 de enero de 1925 llegaron a Asturias una fotógrafa americana,  Ruth M. Anderson (1893-1983), y su padre. Ella venía a documentar la región para la Hispanic Society of America, el museo de Nueva York en el que trabajaba. En los meses siguientes tomó más de mil fotografías cuya calidad y temática no dejan de impresionar al espectador. Seguía las instrucciones que había recibido del fundador del museo, Archer M. Huntington (1870-1955).
La Hispanic Society se había fundado en 1904. En poco tiempo se convertiría en el museo y biblioteca de Estados Unidos más importante sobre la cultura hispánica. Su trabajo haría a esta institución merecedora del Premio Princesa de Asturias de Cooperación Internacional en 2017.
Desde el principio, la fotografía constituyó una parte notable de la colección. En este sentido, destacan las expediciones que Huntington encargó a Anderson, que recorrió toda España en varias campañas desde 1923 hasta 1930. La unidad temática que caracteriza su obra se debe a las directrices de Huntington, quien quiso que se documentase una eterna España de tradiciones, centrándose al mismo tiempo en vistas de ciudades, capitales de
provincia y pueblos, y en el registro de imágenes de la vida diaria, desde artesanías locales a mercados y celebraciones públicas.
Con respecto a Asturias, el interés de Huntington por lo tradicional y castizo modeló de forma evidente las imágenes de Anderson. En estas podemos ver por primera vez ámbitos de la vida cotidiana hasta ahora desconocidos, como interiores de palacios y casas de campesinos, de antiguos mercados cubiertos o de tabernas; espacios que, gracias a las fotografías de Anderson, se desvelan por primera vez. 

Capturadas para siempre en su obra, las imágenes de Asturias son el insólito documento de un mundo perdido. Es por ello que, cuando tenemos la oportunidad de asomarnos a observar detalles cotidianos que tuvieron lugar hace noventa y cuatro años, estamos en verdad ante el «hallazgo de lo ignorado».